Thomas Jefferson (13 de abril de 1743 — 4 de julio de 1826) fue el tercer presidente de los Estados Unidos de América, ocupando el cargo entre 1801 y 1809. Pertenecía a la aristocracia de grandes hacendados del Sur, posición que había completado haciéndose abogado.
Anteriormente también había ocupado los cargos de Vicepresidente (entre 1797 y 1801) y de gobernador de Virginia (1779-1781).
Siendo conocido además por el hecho de ser el autor principal de la Declaración de Independencia de los Estados Unidos y por fundar la Universidad de Virginia (1819), que fue declarada por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad en 1987.
Biografía General
Thomas Jefferson nació en Shadwell (Virginia) el 13 de abril de 1743, en el seno de una familia acomodada. Fue el tercero de los diez hijos (dos de los cuales nacieron muertos) del matrimonio formado por Peter Jefferson y Jane Randolph, dueños de una plantación que llevaba el nombre de la ciudad. En 1752, Jefferson comenzó a asistir a clase en una escuela local. A los nueve años de edad, empezó a estudiar latín, griego clásico y francés. En 1757, cuando tenía catorce años, su padre murió, con lo que él heredó unos 5.000 acres de terreno, donde construyó su residencia, Monticello.
Algún tiempo más tarde ingresó en la Universidad The College of William and Mary, donde se graduó con honores en el año 1762. A continuación estudió Derecho con el profesor George Wythe y comenzó a practicar la abogacía en 1767. En 1772, Jefferson contrajo matrimonio con una viuda, Martha Wayles Skelton (1748-1782). Tuvieron seis hijos, pero Martha falleció el 6 de septiembre de 1782, con lo que Jefferson quedó viudo y no volvió a casarse. Se asegura que, además, tuvo al menos siete hijos con Sally Hemings, una de sus esclavas.
Fue delegado continental del congreso, gobernador de Virginia, Secretario de Estado, Vicepresidente y Presidente. Tras este último cargo, se retiró a su estado natal, donde falleció, el 4 de julio de 1826, a la edad de 83 años.
Thomas Jefferson murió curiosamente el mismo día que su gran rival político y amigo personal, John Adams. El 4 de Julio de 1826 fue además el 50 aniversario de la Declaración de Independencia.
Declaración de Independencia
Thomas Jefferson fue nombrado en junio de 1775 delegado por Virginia para el Segundo Congreso Continental, poco después del estallido de la Guerra de Independencia Americana. Un año después, en junio de 1776, el Congreso empezó a debatir una resolución de independencia. Jefferson fue nombrado miembro de un comité formado por cinco hombres a quien se les encargó confeccionar una declaración de independencia que acompañará a la resolución. Dicha comisión solicitó a Jefferson que realizara un primer borrador para la declaración, probablemente fuera debido a la reputación que tenía Jefferson como escritor. Este tipo de peticiones era algo normal en aquella época, y nadie pensaba que se trataba de un encargo de mayor responsabilidad. Jefferson realizó un borrador de la declaración tras consultar con otros miembros de la comisión, y tomando como referencias su propia propuesta para la Constitución de Virginia, el borrador que realizó George Mason para la Declaración de Derechos de Virginia, y otras fuentes.
Jefferson enseñó el borrador primero al comité de los cinco, que realizaron algunos cambios en el documento para, a continuación, presentarlo al Congreso el 28 de junio de 1776. Después de votar a favor de la resolución de independencia el 2 de julio, el Congreso centró su atención en la declaración. Durante dos días se debatió el documento presentado por el comité, se realizaron varias modificaciones, suprimiendo casi una cuarta parte del texto y eliminando las referencias a la esclavitud, aprobándose el 4 de julio de 1776.
Compra de Luisiana
Se denomina compra de Luisiana a la adquisición de una extensa región en Norteamérica efectuada por Estados Unidos a Francia en 1803. El territorio, de unos 2.100.000,- km2, comprendía los actuales estados de Arkansas, Missouri, Iowa, la zona de Minnesota al este del río Mississippi, Dakota del Norte, Dakota del Sur, Nebraska, Oklahoma, la mayor parte de Kansas, zonas de Montana, Wyoming, el territorio de Colorado al este de las montañas Rocosas y el de Luisiana al este del río Mississippi, con la ciudad de Nueva Orleans incluida.
La región de Luisiana fue ocupada por Francia a comienzos del siglo XVIII. En 1763, el tratado de París, que puso fin a la guerra de los Siete Años, estableció que la zona oriental del Mississippi fuera cedida a Gran Bretaña, al tiempo que ratificaba el tratado de Fontainebleau por el que Francia cedió el resto de Luisiana a España en compensación por la pérdida de Florida. En 1800 este territorio volvió a la soberanía francesa por el tercer tratado de San Ildefonso. En 1802, no obstante, se produjeron dos hechos que el presidente Thomas Jefferson consideró hostiles para los intereses de Estados Unidos: el envío de tropas francesas a Nueva Orleans y a la isla de Santo Domingo para reprimir sublevaciones que habían estallado en esos territorios, y la supresión del derecho de depósito, privilegio acordado tiempo atrás con los comerciantes estadounidenses para guardar mercancías en Nueva Orleans hasta su trasbordo. Jefferson envió a James Monroe a París para colaborar con el ministro plenipotenciario en Francia, Robert R. Livingston, en el intento de realizar una de las cuatro posibilidades siguientes: la compra de la Florida oriental y occidental y de Nueva Orleans; la adquisición sólo de Nueva Orleans; la compra del territorio a orillas del río Mississippi para construir un puerto estadounidense o bien la adquisición a perpetuidad de los derechos de navegación y almacenamiento.
Las negociaciones previas entre Livingston y el ministro francés de Asuntos Exteriores, Charles Maurice de Talleyrand-Périgord, fracasaron. Más tarde la situación internacional empeoró para Francia. El ejército francés de Santo Domingo quedó diezmado por una epidemia de fiebre amarilla y la sublevación estalló en la isla. Napoleón, decidido a sacar el mejor provecho de tan complicada situación, dio nuevas instrucciones a Talleyrand y el 11 de abril de 1803, éste sorprendió a Monroe y Livingston con un único e innegociable ofrecimiento: la compra de la totalidad de Luisiana. Aunque esta operación rebasaba sus competencias, los embajadores estadounidenses aceptaron. A comienzos de mayo, se firmaron tres documentos por los que Francia cedía Luisiana a Estados Unidos. El precio acordado fue de 15 millones de dólares, de los cuales 11.250.000 suponían el pago a Francia de los derechos de cesión de los territorios. Los restantes 3.750.000 dólares fueron utilizados por el gobierno de Estados Unidos para satisfacer las reclamaciones de sus ciudadanos contra Francia.
En el momento de la compra, Jefferson fue interpelado sobre la constitucionalidad de la adquisición de territorios por no añadir una nueva enmienda a la Constitución estadounidense que le diera cobertura legal. No obstante, la adquisición de Luisiana fue ratificada por el Senado de Estados Unidos bajo la forma de tratado.
Ideología
Thomas Jefferson consideraba que todos los hombres eran igualmente libres e independientes y tenían derecho a la vida, la libertad, los medios de adquirir propiedades y la búsqueda de la felicidad y la seguridad. Esto se desprende del primer artículo de la Declaración de Derechos de Virginia redactada por George Mason en 1776.
Aclaró en su autobiografía que, las razas blancas y negras, igualmente libres, no pueden vivir en un mismo gobierno.
Monumento Thomas Jefferson Memorial
La base de la democracia jeffersoniana consiste en:
democracia participativa
separación de poderes
separación Iglesia-Estado
mentor de la libertad de conciencia por antonomasia
el gobierno debe proteger la libertad de los individuos
libertades de expresión y de prensa
Sin embargo, durante el siglo XIX continuó el ímpetu libertario. Los movimientos jeffersonianos y jacksonianos, los partidos Demócrata-Republicano y luego Demócrata, lucharon abiertamente por lograr la virtual eliminación del gobierno de la vida estadounidense. Debía ser un gobierno sin ejército o armada permanentes; un gobierno sin deudas y sin gravámenes federales directos ni impuestos confiscatorios, y prácticamente sin aranceles a la importación --es decir, con niveles ínfimos de impuesto y gasto--, un gobierno que no se comprometiera en obras públicas o mejoras internas, que no controlara ni regulara, que dejara al dinero y al sistema bancario en libertad, sólido y exento de inflación; en resumen, citando las palabras del ideal de H. L. Menken, "un gobierno que apenas sí es un gobierno".
El avance jeffersoniano hacia la virtual inexistencia del Gobierno se malogró después de que Jefferson asumió la presidencia, primero, a causa de concesiones a los federalistas (posiblemente como resultado de un acuerdo destinado a obtener votos federalistas para quebrar una paridad en el colegio electoral), y luego por la compra inconstitucional del territorio de Luisiana. Pero el fracaso se debió sobre todo al impulso imperialista hacia la guerra con Inglaterra durante el segundo período de Jefferson, un impulso que condujo a la guerra y a un sistema unipartidista que estableció, casi por completo, el programa estatista federalista: altos gastos militares, un banco central, aranceles proteccionistas, impuestos federales directos, obras públicas. [...]
Anteriormente también había ocupado los cargos de Vicepresidente (entre 1797 y 1801) y de gobernador de Virginia (1779-1781).
Siendo conocido además por el hecho de ser el autor principal de la Declaración de Independencia de los Estados Unidos y por fundar la Universidad de Virginia (1819), que fue declarada por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad en 1987.
Biografía General
Thomas Jefferson nació en Shadwell (Virginia) el 13 de abril de 1743, en el seno de una familia acomodada. Fue el tercero de los diez hijos (dos de los cuales nacieron muertos) del matrimonio formado por Peter Jefferson y Jane Randolph, dueños de una plantación que llevaba el nombre de la ciudad. En 1752, Jefferson comenzó a asistir a clase en una escuela local. A los nueve años de edad, empezó a estudiar latín, griego clásico y francés. En 1757, cuando tenía catorce años, su padre murió, con lo que él heredó unos 5.000 acres de terreno, donde construyó su residencia, Monticello.
Algún tiempo más tarde ingresó en la Universidad The College of William and Mary, donde se graduó con honores en el año 1762. A continuación estudió Derecho con el profesor George Wythe y comenzó a practicar la abogacía en 1767. En 1772, Jefferson contrajo matrimonio con una viuda, Martha Wayles Skelton (1748-1782). Tuvieron seis hijos, pero Martha falleció el 6 de septiembre de 1782, con lo que Jefferson quedó viudo y no volvió a casarse. Se asegura que, además, tuvo al menos siete hijos con Sally Hemings, una de sus esclavas.
Fue delegado continental del congreso, gobernador de Virginia, Secretario de Estado, Vicepresidente y Presidente. Tras este último cargo, se retiró a su estado natal, donde falleció, el 4 de julio de 1826, a la edad de 83 años.
Thomas Jefferson murió curiosamente el mismo día que su gran rival político y amigo personal, John Adams. El 4 de Julio de 1826 fue además el 50 aniversario de la Declaración de Independencia.
Declaración de Independencia
Thomas Jefferson fue nombrado en junio de 1775 delegado por Virginia para el Segundo Congreso Continental, poco después del estallido de la Guerra de Independencia Americana. Un año después, en junio de 1776, el Congreso empezó a debatir una resolución de independencia. Jefferson fue nombrado miembro de un comité formado por cinco hombres a quien se les encargó confeccionar una declaración de independencia que acompañará a la resolución. Dicha comisión solicitó a Jefferson que realizara un primer borrador para la declaración, probablemente fuera debido a la reputación que tenía Jefferson como escritor. Este tipo de peticiones era algo normal en aquella época, y nadie pensaba que se trataba de un encargo de mayor responsabilidad. Jefferson realizó un borrador de la declaración tras consultar con otros miembros de la comisión, y tomando como referencias su propia propuesta para la Constitución de Virginia, el borrador que realizó George Mason para la Declaración de Derechos de Virginia, y otras fuentes.
Jefferson enseñó el borrador primero al comité de los cinco, que realizaron algunos cambios en el documento para, a continuación, presentarlo al Congreso el 28 de junio de 1776. Después de votar a favor de la resolución de independencia el 2 de julio, el Congreso centró su atención en la declaración. Durante dos días se debatió el documento presentado por el comité, se realizaron varias modificaciones, suprimiendo casi una cuarta parte del texto y eliminando las referencias a la esclavitud, aprobándose el 4 de julio de 1776.
Compra de Luisiana
Se denomina compra de Luisiana a la adquisición de una extensa región en Norteamérica efectuada por Estados Unidos a Francia en 1803. El territorio, de unos 2.100.000,- km2, comprendía los actuales estados de Arkansas, Missouri, Iowa, la zona de Minnesota al este del río Mississippi, Dakota del Norte, Dakota del Sur, Nebraska, Oklahoma, la mayor parte de Kansas, zonas de Montana, Wyoming, el territorio de Colorado al este de las montañas Rocosas y el de Luisiana al este del río Mississippi, con la ciudad de Nueva Orleans incluida.
La región de Luisiana fue ocupada por Francia a comienzos del siglo XVIII. En 1763, el tratado de París, que puso fin a la guerra de los Siete Años, estableció que la zona oriental del Mississippi fuera cedida a Gran Bretaña, al tiempo que ratificaba el tratado de Fontainebleau por el que Francia cedió el resto de Luisiana a España en compensación por la pérdida de Florida. En 1800 este territorio volvió a la soberanía francesa por el tercer tratado de San Ildefonso. En 1802, no obstante, se produjeron dos hechos que el presidente Thomas Jefferson consideró hostiles para los intereses de Estados Unidos: el envío de tropas francesas a Nueva Orleans y a la isla de Santo Domingo para reprimir sublevaciones que habían estallado en esos territorios, y la supresión del derecho de depósito, privilegio acordado tiempo atrás con los comerciantes estadounidenses para guardar mercancías en Nueva Orleans hasta su trasbordo. Jefferson envió a James Monroe a París para colaborar con el ministro plenipotenciario en Francia, Robert R. Livingston, en el intento de realizar una de las cuatro posibilidades siguientes: la compra de la Florida oriental y occidental y de Nueva Orleans; la adquisición sólo de Nueva Orleans; la compra del territorio a orillas del río Mississippi para construir un puerto estadounidense o bien la adquisición a perpetuidad de los derechos de navegación y almacenamiento.
Las negociaciones previas entre Livingston y el ministro francés de Asuntos Exteriores, Charles Maurice de Talleyrand-Périgord, fracasaron. Más tarde la situación internacional empeoró para Francia. El ejército francés de Santo Domingo quedó diezmado por una epidemia de fiebre amarilla y la sublevación estalló en la isla. Napoleón, decidido a sacar el mejor provecho de tan complicada situación, dio nuevas instrucciones a Talleyrand y el 11 de abril de 1803, éste sorprendió a Monroe y Livingston con un único e innegociable ofrecimiento: la compra de la totalidad de Luisiana. Aunque esta operación rebasaba sus competencias, los embajadores estadounidenses aceptaron. A comienzos de mayo, se firmaron tres documentos por los que Francia cedía Luisiana a Estados Unidos. El precio acordado fue de 15 millones de dólares, de los cuales 11.250.000 suponían el pago a Francia de los derechos de cesión de los territorios. Los restantes 3.750.000 dólares fueron utilizados por el gobierno de Estados Unidos para satisfacer las reclamaciones de sus ciudadanos contra Francia.
En el momento de la compra, Jefferson fue interpelado sobre la constitucionalidad de la adquisición de territorios por no añadir una nueva enmienda a la Constitución estadounidense que le diera cobertura legal. No obstante, la adquisición de Luisiana fue ratificada por el Senado de Estados Unidos bajo la forma de tratado.
Ideología
Thomas Jefferson consideraba que todos los hombres eran igualmente libres e independientes y tenían derecho a la vida, la libertad, los medios de adquirir propiedades y la búsqueda de la felicidad y la seguridad. Esto se desprende del primer artículo de la Declaración de Derechos de Virginia redactada por George Mason en 1776.
Aclaró en su autobiografía que, las razas blancas y negras, igualmente libres, no pueden vivir en un mismo gobierno.
Monumento Thomas Jefferson Memorial
La base de la democracia jeffersoniana consiste en:
democracia participativa
separación de poderes
separación Iglesia-Estado
mentor de la libertad de conciencia por antonomasia
el gobierno debe proteger la libertad de los individuos
libertades de expresión y de prensa
Sin embargo, durante el siglo XIX continuó el ímpetu libertario. Los movimientos jeffersonianos y jacksonianos, los partidos Demócrata-Republicano y luego Demócrata, lucharon abiertamente por lograr la virtual eliminación del gobierno de la vida estadounidense. Debía ser un gobierno sin ejército o armada permanentes; un gobierno sin deudas y sin gravámenes federales directos ni impuestos confiscatorios, y prácticamente sin aranceles a la importación --es decir, con niveles ínfimos de impuesto y gasto--, un gobierno que no se comprometiera en obras públicas o mejoras internas, que no controlara ni regulara, que dejara al dinero y al sistema bancario en libertad, sólido y exento de inflación; en resumen, citando las palabras del ideal de H. L. Menken, "un gobierno que apenas sí es un gobierno".
El avance jeffersoniano hacia la virtual inexistencia del Gobierno se malogró después de que Jefferson asumió la presidencia, primero, a causa de concesiones a los federalistas (posiblemente como resultado de un acuerdo destinado a obtener votos federalistas para quebrar una paridad en el colegio electoral), y luego por la compra inconstitucional del territorio de Luisiana. Pero el fracaso se debió sobre todo al impulso imperialista hacia la guerra con Inglaterra durante el segundo período de Jefferson, un impulso que condujo a la guerra y a un sistema unipartidista que estableció, casi por completo, el programa estatista federalista: altos gastos militares, un banco central, aranceles proteccionistas, impuestos federales directos, obras públicas. [...]
No hay comentarios:
Publicar un comentario